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martes, 2 de marzo de 2021

Crítica: LA MADRE DEL BLUES

Desde Netflix, nos llega una gran obra teatral llevada al cine. Viola Davis y Chadwick Boseman (en su última película) lo bordan entre apenas cuatro paredes y buenas dosis de monólogos. Esta semana hemos visto: LA MADRE DEL BLUES.
Ma Rainey's black bottom está dirigida por George C. Wolfe, quien tiene a Viola Davis y a Chadwick Boseman como aliados para sacar adelante esta obra, junto a Glynn Turman, Michael Potts y Colman Domingo. No diré que no me ha gustado, puesto que sí lo ha hecho, pero es evidente que la película es más una obra de teatro hecha para que sus protagonistas brillen a base de monólogos y sobreactuaciones. Ya pasó con Fences, y a Viola Davis le valió un Oscar, así que, quién sabe si no vuelve a repetir. Y repito, aún así funciona porque ocurre en un estudio de grabación y su sótano, donde un grupo de músicos habla sobre la vida y el futuro, donde las rencillas no dejan de sucederse.
Porque en el año 1927 las cosas no son fáciles para los negros. Ma Rainey, la Madre del Blues (Viola Davis) se encuentra grabando en el estudio mientras discute con su agente y productor por el control de sus canciones. Mientras tanto, en el sótano sus músicos discuten y hablan sobre el toque más movido que se les puede dar a estas. Entre sus partidarios el trompetista Levee (Chadwick Boseman), quien tiene unas inconmensurables ansias de triunfo, escribe música y tiene un pasado oscuro que saca a relucir de vez en cuando. En LA MADRE DEL BLUES los diálogos son muy de teatro, sobreactuados en su mayoría y con falta de base previa para el espectador, eso se traduce en poco conocimiento de los personajes  que se nos muestran, al margen de las conclusiones que puede sacar el espectador. Lo dicho: una obra de teatro en pantalla grande. Y aún así logra atrapar y gustar, hay que decirlo.
En definitiva, LA MADRE DEL BLUES es nuestra última oportunidad de ver a Chadwick Boseman interpretando. Se llevará su nominación al Oscar (ya se ha llevado el Globo de Oro, de hecho) al igual que Viola Davis pero, sinceramente, no me parecería adecuado que pasara por delante de Anthony Hopkins, quien casi lo tiene asegurado con El Padre. Con Viola Davis no lo tengo tan claro, es posible que pueda pelearlo, pero no debería servirle mientras Olivia Colman esté ahí. En cualquier caso, otra película de Netflix que salva el año cinéfilo. No os la perdáis.

2 comentarios:

  1. Hola, Félix:
    Pese a todo me la apunto para verla tranquilamente un día de estos. Muy teatral también es "Malcolm & Laurie" de Sam Levinson, y no por eso desmerece en nada. También me interesa ver a Chadwick Boseman y en mi fuero interno decidir quien, si él o Anthony Hopkins, merecerá el Oscar. Estoy contigo en que Hopkins en "El padre" está soberbio.
    Gracias por esta ilustrativa reseña, amigo
    Un abrazo

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    Respuestas
    1. Gracias, Juan Carlos. Me gustó mucho, eso está claro, pero esa sobreactuación propia del teatro es muy evidente. Él se ha llevado el Globo de Oro, pero sigo pensando que Hopkins quizás lo merece más.
      ¡Un saludo, gracias por pasarte!

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