Crítica: UNA NOCHE EN MIAMI...

Nadie sabe realmente qué pasó aquella noche en la que Cassius Clay, Malcom X, Sam Cooke y Jim Brown se reunieron tras la victoria del boxeador que inició el camino de una leyenda y también su cambio de nombre. Nominada a 3 Oscars. Esta semana hemos visto: UNA NOCHE EN MIAMI.

One night in Miami... está dirigida por Regina King, quien consigue llevar al cine una obra de teatro muy interesante, con personajes muy potentes y un gran mensaje. Aquella noche en la que Cassius Clay venció a Sonny Liston en el 64, nadie imaginaba que comenzaría una leyenda. Ese mismo día, anunció que su nombre sería Cassius X, y posteriormente Muhammad Alí. Se dice que parte de su decisión fue tomada aquella misma noche, mientras compartía la victoria en un hotel de Miami. En su habitación, celebrándolo junto a él, se encontraban el activista Malcom X (Kingsley Ben-Adir), el cantante Sam Cooke (Leslie Odom Jr.) y uno de los mejores jugadores de fútbol americano de la historia, Jim Brown (Aldis Hodge). Todos ellos de éxito, todos ellos negros, víctimas de segregación racial y con mucho que decir.

Se supo que esa reunión tuvo lugar, pero no qué se habló o se dijo en ella. Sin embargo, Regina King nos lo cuenta de una manera realmente interesante, con diálogos propios del teatro, muy potentes. Eso, junto a la gran interpretación de los actores, forma un filme que hipnotizará al espectador. La película está nominada a 3 Oscars, entre ellos mejor canción, mejor guion adaptado y mejor actor secundario (Leslie Odom Jr.). En mi opinión, es una de las mejores películas del año, que no cae en la sobreactuación a pesar de venir del teatro, y que pica la curiosidad del espectador a la hora de conocer mucho más sobre los personajes que aparecen en ella. Desde luego, Malcom X, Sam Cooke y Jim Brown tuvieron que trabajar mucho para ser reconocidos y tener voz propia en un mundo dominado por blancos.

En definitiva, UNA NOCHE EN MIAMI... es una película de Amazon Prime Video que me ha dejado con grandes sensaciones. Sus interpretaciones son de gran nivel y el mensaje que se nos envía es tan potente como sus diálogos. Un filme que ayuda a pensar, a ver dónde estamos y cuánto hemos conseguido pero, a su vez, cuánto nos queda por caminar todavía. Imprescindible de este año y posiblemente también susceptible de pasarla en estamentos educativos, quizás a nivel universitario por la complejidad de sus diálogos y los nombres propios que aparecen en ella. No os la podéis perder.